Muchas gracias por haber formado parte de los primeros años de mis hijos y, por tanto, de participar en la base que sustenta a las personas que algún día llegarán a ser.

Gracias. Por los síes, por los noes; por las risas, por los llantos; por los ahora, por los luego; por los tal vez; por las vivencias y experiencias; por los recuerdos (para los padres); por las salidas al pueblo y por las otras; por la Noche Mágica y la magia del resto de los días... Por las bienvenidas, por las despedidas. Por las fotos, la escucha y el tiempo que nos habéis dedicado. Por tanto y por tanto..., os tendremos siempre en nuestro recuerdo.

Tuve la suerte de poder hacer alguna suplencia en este centro y fue una experiencia maravillosa, además de lo  genial que lo pasó Iván. Gracias por el cariño que demostráis cada día y por vuestro trabajo.

Enseñar a vivir a otro es difícil, pero hacerlo con el cariño y esfuerzo como si fuera tu propio hijo... no tiene palabras, ni forma  de agradecerlo lo suficiente. Solo puedo decir Gracias!!!  Soy reincidente, he traído al segundo.

Maravillosos momentos vividos. Muchos inolvidables. Gracias siempre por ese trabajo que con cariño y dedicación dais.

Entrañable ver como, generación tras generación, la casita ha sido un espacio en el que pequeños y grandes han disfrutado juntos de lo mejor que tenemos, la ilusión, los sueños y el ser capaces de compartir todo esto. Mis mejores deseos para los próximos años y felicidades a su gran equipo sin el que, sin duda, todo esto no habría sido posible.

¡Qué más se os puede decir? Que formáis y formareis parte de nuestras vidas siempre. Gracias por estos años.